Un trastorno de la alimentación es una enfermedad mental, que produce intensas perturbaciones en la rutina alimentaria diaria, que pueden ir desde comer en exceso hasta ayunar. Afectan tanto a mujeres como a hombres pero, la prevalencia es mucho mayor en mujeres.
Los trastornos de la alimentación más comunes son la anorexia nerviosa, bulimia nerviosa y el trastorno por atracón.
Anorexia Nerviosa
Este trastorno se caracteriza por llegar una distorsión de la imagen corporal que lleva a realizar todo tipo de comportamientos (ayuno, purgas, uso de laxantes etc.) que conduzcan a conseguir un adelgazamiento extremo negando la posibilidad de tener un peso normal o saludable por miedo a engordar. Suelen tener una autoestima significativamente influenciada por las percepciones de la forma y el peso del cuerpo. Las consecuencias son muy graves tanto a nivel físico como psicológico.
Bulimia Nerviosa
Al contrario que en la anorexia, las personas con bulimia nerviosa suelen tener un peso normal o incluso elevado. El problema radica en los episodios frecuentes y recurrentes de ingesta de cantidades excesivamente grandes de comida y una sensación de falta de control de impulsos. Los sentimientos de culpabilidad tras el atracón llevan a realizar conductas compensatorias que pueden ir desde vómitos, abuso de laxantes, diuréticos, ayuno o ejercicio físico intenso.
Trastorno por Atracón
Estas personas suelen tener sobrepeso ya que a diferencia de la bulimia nerviosa, a los episodios de atracones no les siguen comportamientos compensatorios como purgas, ayunos o ejercicio físico intenso.
Frecuencia en el mundo deportivo
El mundo deportivo está cargado de competitividad, exigencia y tendencia al perfeccionismo. Es por ello por lo que es uno de los principales escenarios en los que se pueden desarrollar este tipo de trastornos de alimentación. Sabe que entorno al 62% de las mujeres deportistas profesionales experimentan algún tipo de trastorno de la conducta alimentaria. Las mujeres deportistas que experimentan estos problemas con mayor frecuencia son las esquiadoras (33%), seguidas por las corredoras de fondo (32%).
Factores de Riesgo más frecuentes para padecer TCA en Deportistas
Personalidad
Las características de personalidad del deportista van a determinar la propensión a padecer este tipo de problemas. Por lo general un deportista profesional suele tener una personalidad perfeccionista, competitiva, exigente etc. Estos rasgos marcan una tendencia a la obsesión por cumplir las metas y objetivos propuestos y puede llegar a ser bastante peligroso en lo que a alimentación se refiere.
Insatisfacción corporal
La insatisfacción corporal es un factor clave para padecer cualquier trastorno de la alimentación.
Presiones sociales
(Por parte de entrenadores, compañeros y público): Existe una tendencia a pensar que en determinados deportes estéticos como son el ballet o la gimnasia rítmica el bajo peso puede estar relacionado con el mejor rendimiento y la obtención de resultados, esto hace que un gran porcentaje de chicas decidan mantener un peso realmente bajo con el objetivo de llegar al éxito deportivo.
Por otro lado también existe presión externa con respecto a la estética, ya que en deportes como la gimnasia rítmica los jueces suelen puntuar más alto a aquellas deportistas que cumplan con ciertos cánones de belleza asociados a la delgadez.
En ocasiones los propios entrenadores o padres de deportistas ejercen mucha presión en el tema de la alimentación (esto es más frecuente en deportes como la natación, la gimnasia rítmica y el judo o karate).
Modalidad deportiva
El tipo de deporte practicado va a ser un factor de riesgo para desarrollar trastornos de la alimentación. Aquellos deportes llamados “estéticos”, entre los que se encuentran la natación sincronizada, el patinaje artístico, o la gimnasia rítmica, son los que presentan en mayor medida casos de trastornos de alimentación y de insatisfacción corporal. Un alto porcentaje de casos también se da en deportes del tipo judo, kárate, boxeo etc. al ser deportes donde el peso que marca la báscula determina la categoría en la que se compite.
Eventos estresantes
Diferentes circunstancias en la vida del deportista como una lesión importante, la pérdida de un entrenador personal, perder una competición para la que se han dedicado grandes esfuerzos etc. pueden ser factores disparadores de los trastornos.
¿Cómo Prevenir?
El papel que los entrenadores tienen en la prevención de los TCA con sus deportistas es muy determinante. Por un lado el entrenador debe de ser consciente de la gran influencia que tiene en la vida del deportista y debe dar ejemplo en lo que ha hábitos de vida saludables se refiere. Por ello el entrenador debe de revisar sus propios valores y juicios con respecto a la imagen corporal y al peso, eliminando estereotipos de cualquier tipo.
Tanto el entrenador como los familiares de un deportista profesional deben de estar informados de los síntomas de los trastornos de alimentación para poder detectar a tiempo cualquier propensión a estos. Para ello sería adecuado que se informasen de todo lo relacionado con el peso y la nutrición en deportistas. Sólo de esta manera se le puede transmitir la idea al deportista de que debe de mantener una alimentación completa, sana y equilibrada.
Es clave que no se le de tanta importancia al peso o a la silueta en relación al rendimiento deportivo si no a otros aspectos como la fuerza, la constancia o las capacidades de autosuperación.
Recuerda, los objetivos se consiguen con la mente, no con el cuerpo.